Editorial

El Insurgente
4 min readOct 23, 2021

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El Estado principal promotor del neoliberalismo en educación superior

Con toda seriedad, en Bloque Popular hemos revisado el presente artículo Universidad Nacional: ¿se volvió individualista como afirma AMLO? Aparecido en el periódico Izquierda diario. Consideramos que el artículo que comentamos cae en la retórica y en contradicciones; deja de analizar las causas estructurales sufridas en la estructura y composición social de la UNAM, análisis que es sustituido con retórica, como decir: “una universidad del lado de la mayoría (sic) de los trabajadores”, sin avanzar un ápice en identificar al enemigo en casa.

1.- Aunque duela, la comunidad y la estructura de la UNAM como en el resto de las universidades públicas, participan del pensamiento neoliberal y en función de ello, se ha estructurado la academia, los planes de estudio y la bibliografía.

2.- Estamos de acuerdo que la pauperización de la vida de la familia obrera ha modificado la composición social, un menor número de individuos de estratos bajos tienden a ingresar a la institución universitaria, y, en sentido inverso, aumenta el número de muchachos provenientes de clase media. En el interior de la república éste fenómeno es más claro en virtud de que las instituciones de educación pública cobran cuotas altas de inscripción y de exámenes de regularización y extraordinarios. Del posgrado, ya ni hablemos, las colegiaturas, en caso de no estar en el padrón de Conacyt, son casi imposible de cubrir en un amplio arcoíris social.

3.- Si bien la comunidad estudiantil de la UNAM, única a nivel nacional, ha logrado detener la privatización abierta de la institución, gracias al movimiento estudiantil de 1999 que se opuso al aumento de cuotas, no obstante, esa manera de ver, entender y hacer que es el pensamiento neoliberal ha entrado en la institución por diferentes poros, como:

A.- A través de los pares colegiados (los cieses) que son instrumento de la SEP que durante largo tiempo fungieron como certificadores de las carreras profesionales; de exigir el cumplimiento a los lineamientos que los cuerpos colegiados -catedráticos mercenarios contratados por la SEP- establecían en su diagnóstico; quien acatara, le eran otorgados recursos económicos a la institución y, al mismo tiempo, a la escuela o carrera certificada para atender asuntos académicos de sus catedráticos.

B.- Esos cuerpos colegiados revisaban los planes de estudio -contraviniendo la libertad de cátedra y violentando la autonomía universitaria- establecían los ejes del programa de estudio y el eje del plan de estudio por materia, y en ello iba las lecturas que tenían que revisarse en la materia. La orientación que el curso tomaba era abiertamente en el marco del pensamiento sistémico y el establecido por una instancia exógena a la universidad, y como efecto de ello, eran puestas a un lado las lecturas de orientación crítica, bajo el falso argumento de que no formaban ya parte de las lecturas recomendadas por la comunidad científica.

C.- Las instancias colectivas institucionales fueron entonces abolidas, hablamos de los Consejos Técnicos que permanecieron formalmente, pero en la realidad nunca cumplieron función alguna. Lo mismo podemos decir del Consejo Universitario, en relación a lo académico.

D.- Los mecanismos de cooptación neoliberal está presente en la forma de retribuir salarialmente al académico, norma que sigue vigente, hablando de la llamada certificación al profesorado -Promep y del programa de desempeño académico- programas que al generar la competencia encarnizada entre los académicos por incrementar sus ingresos, contribuyen firmemente a romper la solidaridad entre los trabajadores, de manera que la brecha salarial entre profesores de tiempo completo y académicos por hora se ha hecho abismal, ya no digamos con el trabajador administrativo. Es la política de sálvese el que pueda de la pauperización salarial.

E.- La organización sindical también sufrió cambios legales; la reforma al artículo 123 y la Ley Federal del Trabajo establecieron una muralla a los sindicatos al impedirles participación en cuestiones académicas, de manera que el campo quedó libre para la patronal. Lo que explica que el sindicalismo académico languidezca hoy en día hasta casi desaparecer.

F.- Las instituciones de educación superior pública fueron presupuestariamente abandonadas, pocos recursos se invierte en la cuestión docente, se tienen salarios raquíticos, están congeladas las plazas para trabajadores académicos, no se tienen bien equipadas las bibliotecas y laboratorios.

G.- En la investigación, se prioriza aquello que requiere las grandes empresas y que están dispuestas a subsidiar. La investigación social está sin los apoyos necesarios y suficientes. Eso explica la situación de marasmo que vive la investigación social principalmente, y al mismo tiempo, permite entender por qué universidades particulares tienden a sobresalir, muchas de ellas debido al respaldo empresarial y público, un ejemplo es el ITAM.

4.- Si se desea rebatir las provocaciones-justificaciones de López Obrador, hay que identificar el centro difusor del pensamiento neoliberal en las universidades: el aparato de Estado y conocer cómo actúa. Las frases grandilocuentes no contribuyen a establecer el objeto de donde emana lo que criticamos ni menos a definir el objetivo.

El presidente y su partido tienen gran responsabilidad de lo que sucede en las instituciones públicas, el ejemplo es la propia Ley Nacional de Educación, un producto neoliberal de la 4T. Los proyectos Universidad del Bienestar y la Universidad de la Ciudad de México, no son ejemplo de proyectos alternos al neoliberalismo. De eso no dice nada el hombre de Palacio. El promotor y garante del pensamiento neoliberal, de su producción y reproducción en las instituciones públicas, como la UNAM, es el Estado y de ello son responsables los gobernantes.

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