¿Es Rusia un estado imperialista? Una carta de un socialista ruso a David North

4 abril 2022

El World Socialist Web Site ha recibido esta carta de un socialista ruso, comentando una carta escrita por David North, publicada en el WSWS el 2 de abril.

He leído su carta al camarada ruso y no contradice mi posición.

Hay un medio izquierdista en Rusia que reconoce correctamente el papel provocador de Estados Unidos y Europa en el conflicto actual, pero habla de un acto de invasión imperialista ruso.

Inmediatamente planteo la pregunta, ¿qué quieren decir con un acto imperialista? Después de todo, si lo piensas bien, un acto imperialista es una acción llevada a cabo por una potencia capitalista para expandir su poder económico, financiero y militar, buscando repartir el mundo bajo nuevas condiciones de existencia.

Primero, la burguesía rusa no tiene base material para la expansión de su “imperio”. (El capital financiero de Rusia es increíblemente débil en comparación con el capital financiero occidental. De hecho, la influencia del capital financiero ruso se manifiesta plenamente solo en la propia Rusia y parcialmente en varios países “aliados”: Bielorrusia, Siria y otros). En segundo lugar, también falta en el carácter psicológico del estado burgués ruso (que, por supuesto, resulta de las condiciones materiales): no busca derrotar a sus rivales imperialistas, quitarles sus mercados, debilitar su influencia en el mercado. escenario mundial. No, busca hacer un trato con el imperialismo para que la burguesía rusa, acostumbrada a su única posición parasitaria privilegiada en un país rico en materias primas, no sea tocada.

Podemos ver que la invasión de Putin no se basó en ningún motivo para expandir sus mercados (más bien, condujo a su reducción a escala global), o un deseo de redividir el mundo. Putin quiere mantener el mundo como ha sido durante los últimos treinta años, cuando Rusia era “independiente” de los socios occidentales. Durante los últimos treinta años, esta posición ha sido constantemente violada por la expansión hacia el este de la OTAN, que es lo que teme la burguesía rusa, como es lógico.

Y si uno piensa en el hecho de que la burguesía rusa busca expandir su influencia en el escenario mundial de esta manera (es decir, a través de la guerra), eso también es falso. Putin no necesita ninguna expansión para el “mundo ruso”, ya que las condiciones materiales para ello son totalmente inadecuadas y no se lo permitirán. Su tarea principal no es expandirse, sino proteger una posición que permita a la burguesía rusa no temer una intervención militar de la OTAN. Putin es incapaz de destruir la OTAN (excepto en una guerra nuclear), por lo que contará con la OTAN, pero protegiendo sus intereses en las zonas fronterizas de Rusia, como lo hizo en 2008, 2014 y este año.

Si el régimen de Putin fuera imperialista, no veríamos a burgueses rusos vacilantes buscando un trato con el imperialismo, sino a verdaderos depredadores que tomarían a Ucrania y a la población ucraniana como esclava incluso antes de que lo hiciera la OTAN. Además, la burguesía rusa habría reclamado Bielorrusia, el norte de Kazajistán y muchos otros territorios “rusos”. Pero no vemos eso porque no hay una base imperialista real para eso, es decir, no hay un capital financiero fuerte capaz de expandir sus intereses a países más débiles para subyugarlos al centro y explotarlos para la extracción de plusvalía incrementada. . De esta manera, Rusia se volvería imperialista, como lo fue una vez la Rusia presoviética.

Por supuesto, la ausencia de una base real para la expansión no excluye una capa de la burguesía rusa que aspira a ello, pero esta capa es la minoría absoluta. En cualquier caso, para la realización de este objetivo, Rusia tendría que establecer una dictadura fascista nacional. En principio, el actual aislamiento de Rusia podría darle más influencia a esta capa proimperialista, pero mientras haya un régimen de Putin enfrascado en vaivenes maniobrables, febriles e improvisados ​​de un lado a otro, no veremos ninguna política imperialista por parte de Rusia. . Espero que esté de acuerdo con mi posición sobre este punto.

Se debe hacer un punto más: el establecimiento del fascismo requeriría una tremenda militarización, hasta ahora sin precedentes en Rusia, para proporcionar una base real para su política expansiva. Pero es deber de todo marxista revolucionario prevenir tales consecuencias a través de la revolución socialista. No hay otra forma de evitar consecuencias negativas en este asunto, y difícilmente existiría dentro de una sociedad de clases donde la clase revolucionaria es el proletariado.